Uno de los principales males que se producen en los edificios, viviendas y locales son los daños causados
por agua. Esta tipología de siniestros, que representan alrededor del 34% de los accidentes reportados a las
aseguradoras, incluye una de las casuísticas más difíciles de gestionar, las
filtraciones de agua de lluvia.
En el presente caso, nuestro cliente dejó el viernes por la tarde su taller en perfectas condiciones y cuando
regresó el lunes por la mañana pudo comprobar que se habían ocasionado una serie de importantes
desperfectos en el techo y en la maquinaria del taller como consecuencia de la filtración continua de agua
de lluvia desde el patio comunitario.
El asegurado se puso en contacto con Seguros Catalana Occidente para informarnos de lo ocurrido e
inmediatamente se procedió a mandar un perito al taller para valorar los daños sufridos y localizar la causa
de los mismos.
Una vez tasados los daños, que ascendieron a unos 20.000€, y
confirmado que el origen de las filtraciones era comunitario,
dirigimos la reclamación a la Comunidad de Propietarios y
también a su aseguradora de Responsabilidad Civil para poder
resolver el siniestro mediante un acuerdo amistoso. La
aseguradora de la Comunidad de Propietarios rechazó hacerse
cargo de los daños, por lo que procedimos a reclamar
directamente a la Comunidad a través del administrador de la
finca.
La Comunidad de Propietarios demoraba la solución alegando
falta de fondos para hacer frente a la indemnización requerida
por nuestro asegurado así que comenzamos a preparar la
reclamación judicial, advirtiéndole que en breve
presentaríamos demanda. Ante la posibilidad de acudir a juicio,
decidió finalmente indemnizar a nuestro asegurado a su entera
satisfacción.
Gracias a tener contratada la garantía
“Reclamación de Daños” del
Seguro de Comercio de Seguros Catalana
Occidente, nuestro Asegurado dispuso de un equipo de profesionales especializados que defendieron sus
intereses sin coste alguno.